Una nueva generación de equipamiento para motos comienza a tomar forma con el lanzamiento de la primera maleta keyless con transferencia de energía por inducción. El desarrollo, fruto de la colaboración entre NAD—la empresa responsable de SHAD—y Yamaha, se presenta en la Yamaha Tracer 9 GT, y representa un avance práctico en sistemas de apertura, conectividad y seguridad para los motoristas.

A diferencia de las soluciones actuales que dependen de conectores físicos o cableado entre la motocicleta y el baúl, esta nueva tecnología utiliza el sistema WPT (Wiring Power Transfer), que permite una transferencia de energía sin contacto directo. La clave está en un emisor y un receptor que, por proximidad, generan la alimentación necesaria para activar funciones electrónicas sin cables visibles.

Gracias a este sistema, no solo se evita el desgaste o fallo de conexiones debido a la exposición a agua o suciedad, sino que también se facilita el montaje y desmontaje de la maleta, ya que no hay conectores que manipular. Además, este mecanismo permite que la maleta cuente con cierre automático, luz interior de cortesía y puerto de carga USB. Si el motorista olvida cerrar la maleta y arranca la moto, el sistema la bloquea de forma automática al superar los 10 km/h, aportando así un extra de seguridad en marcha.
El reto más importante durante el desarrollo fue acortar el tiempo de emparejamiento entre los módulos de transmisión y recepción de energía. En las primeras fases, este proceso duraba cerca de cinco segundos, algo poco práctico para un uso real. Tras diversas pruebas y un rediseño profundo del software, se consiguió reducir el tiempo de sincronización a solo 0,6 segundos, haciendo que la interacción con la maleta sea casi instantánea.

Este proyecto, que ha requerido más de 4.000 horas de trabajo por parte de los equipos de ingeniería electrónica y mecánica de NAD, ha sido sometido a más de 10.000 kilómetros de test sobre el terreno. También se ha llevado a cabo la certificación internacional de cada componente, garantizando su viabilidad para su producción en serie y comercialización global.
La innovación llega tras un desarrollo que ha durado cuatro años y se ha trabajado en paralelo con la evolución de la propia Yamaha Tracer 9 GT. Actualmente, NAD continúa investigando en el ámbito de la electrónica aplicada a los accesorios para motocicletas y ya trabaja en otros sistemas similares para futuras aplicaciones.

Este tipo de soluciones no solo ofrecen una experiencia más cómoda para el usuario, sino que abren la puerta a un nuevo enfoque en la relación entre motocicleta y equipaje, donde la conectividad y la sencillez ganan protagonismo.