La conexión entre las competiciones automovilísticas y el desarrollo de vehículos para el mercado es estrecha y fundamental. Las condiciones extremas de las carreras sirven como banco de pruebas para tecnologías que, con el tiempo, llegarán a los coches de serie. En este contexto, DS Automobiles ha logrado mantener una presencia destacada, tanto en la Fórmula E como en los rallies, continuando una tradición de innovación que comenzó en los años 60.

Desde sus inicios en la escudería “Ecurie Paris”, bajo la dirección de René Cotton, los coches DS demostraron su valía en todo tipo de pruebas. La escudería logró victorias notables en competiciones tan desafiantes como el Rally Montecarlo, el East African Safari, y el Rally de Marruecos, destacándose en cada una de ellas por su fiabilidad y rendimiento. El DS 21 Coupé, en particular, fue una máquina de éxito, con pilotos como Neyret y Terramorsi, quienes se llevaron el podio en varias ediciones de estos rallies.
En 1971, la entrada del DS SM en los rallies marcó otro hito, con victorias destacadas en el Rally de Marruecos. Fue en este escenario donde los modelos DS y SM demostraron su resistencia y capacidad para superar las pistas más difíciles. A pesar de la desaparición de la escudería oficial en 1975, el legado de la marca en las competiciones continuó siendo recordado.
Casi 40 años después, con la creación de DS Automobiles, la marca renovó su enfoque competitivo participando en el Campeonato de Fórmula E, la principal competición de monoplazas eléctricos del mundo. Desde su primera participación en 2015, DS Performance, el departamento de competición de la marca, ha acumulado victorias y títulos, destacándose en la edición 2019 y 2020 del campeonato, con 16 victorias y 51 podios en total.

El modelo DS E-TENSE FE25 es el ejemplo más reciente de la filosofía de la marca en competición. Este monoplaza, diseñado para afrontar los circuitos urbanos más desafiantes del campeonato, ha sido el resultado de años de investigación en áreas como la movilidad eléctrica, la aerodinámica y el agarre de los neumáticos. Sus avances no solo benefician a los coches de competición, sino que también se trasladan a los modelos de calle de DS Automobiles, como el DS 3, DS 4 y DS 7, mejorando la eficiencia energética y el rendimiento general de los vehículos.

Un aspecto clave en la Fórmula E es la eficiencia energética. Los monoplazas de DS Performance logran aprovechar al máximo la energía, con un 50% de la electricidad consumida durante la carrera proveniente de sistemas de recuperación de energía, como el frenado regenerativo. Esta eficiencia, que se alcanza gracias al desarrollo continuo de nuevas tecnologías, tiene aplicaciones directas en los coches de serie, lo que permite una mayor autonomía y menores tiempos de recarga.
De hecho, la evolución de la tecnología de la Fórmula E ya ha llevado al desarrollo de una estación de carga de 600 kW, capaz de recargar un coche en solo 30 segundos. Esta innovación, aunque inicialmente diseñada para la competición, pronto estará disponible para los conductores de coches eléctricos de calle, lo que demuestra cómo los avances en el ámbito competitivo pueden tener un impacto directo en la movilidad cotidiana.
La experiencia de DS Performance en la Fórmula E también ha influido en el diseño y la gestión energética de sus vehículos de serie. La marca ha logrado crear uno de los mejores sistemas de gestión de la energía entre las escuderías de Fórmula E, con un software optimizado para maximizar el rendimiento de los motores eléctricos. Estos avances se aplican tanto a los modelos totalmente eléctricos como a los híbridos enchufables de la marca, lo que permite una experiencia de conducción más eficiente y sostenible.

El vínculo entre el mundo de las competiciones y el desarrollo de coches de calle sigue siendo clave para las marcas que buscan innovar y ofrecer lo mejor a sus clientes. El legado de DS Automobiles, que comenzó con el DS en los rallies, continúa con los monoplazas eléctricos en la Fórmula E y se refleja en sus vehículos de serie, que incorporan lo mejor de la tecnología de competición para ofrecer una conducción más eficiente y avanzada.