En la década de 1930, Peugeot decidió romper con los estándares tradicionales de diseño y apostó por un modelo con una estética moderna y aerodinámica. Así nació el Peugeot 402 en 1935, un vehículo inspirado en las grandes berlinas americanas de la época, con líneas fluidas y un enfoque innovador que lo diferenciaba del resto.

Su presentación tuvo lugar en el Salón de París de 1935, donde llegó como reemplazo de los Peugeot 401 y 601. Bajo la dirección de Henri Thomas, responsable del Departamento de Estudios de Carrocería de la marca, se concibió un modelo con una silueta estilizada, sin estribos laterales y con una integración inédita de los faros en la carrocería. Este diseño, influenciado por las corrientes estéticas «Streamline Moderne» y «Art Déco», dotó al Peugeot 402 de una imagen elegante y dinámica.

El modelo se comercializó en varias configuraciones, incluyendo versiones sedán, descapotables y comerciales, además del Peugeot 402 L, destinado a taxis y limusinas con una carrocería más larga. Entre las versiones más innovadoras destacó el Peugeot 402 Eclipse, que incorporaba un techo rígido retráctil automático, desarrollado por el diseñador Georges Paulin en colaboración con el carrocero Marcel Pourtout.

En términos mecánicos, el Peugeot 402 montaba un motor de cuatro cilindros y 1.991 cm³ con 55 CV de potencia, alcanzando los 120 km/h. Además, el prototipo 402 Andreau, también conocido como N4X, optimizó la aerodinámica y elevó su velocidad hasta los 140 km/h, con una reducción del consumo de combustible del 30%.

Más allá de su desempeño en la carretera, el Peugeot 402 también dejó su huella en la competición. La versión deportiva Darl’Mat participó en las 24 Horas de Le Mans, logrando una victoria en la categoría de 2 litros con el equipo De Cortanze-Cortet, lo que consolidó la presencia de la marca en el mundo del automovilismo.

El Peugeot 402 también encontró su lugar en la cultura popular, apareciendo en varias producciones cinematográficas. En Hollywood, se le vio en películas como “Medianoche” (1939) y “Los Caballeros las Prefieren Rubias” (1953), mientras que en España destacó en filmes como “Una Chica casi Formal” (1963) y en la serie “Las Chicas del Cable” de Netflix.