Bentley baja el telón en una era dorada de la automoción con la despedida al último motor W12 fabricado a mano en su sede de Crewe. Este poderoso corazón mecánico ha impulsado durante años los icónicos modelos Bentayga, Continental GT y Flying Spur, dejando una huella imborrable en la historia de la marca.
Más de cien mil unidades del W12 han salido de las líneas de producción desde su debut en el Continental GT de 2003. Esta decisión estratégica marca un hito en la trayectoria de Bentley, que avanza firmemente hacia un futuro de lujo sostenible con su visión Beyond100.
Para conmemorar este momento histórico, Bentley organizó un emotivo almuerzo y una sesión fotográfica con los equipos de ensamblaje e investigación y desarrollo del W12. Cada miembro recibió un pistón del motor como recuerdo de esta etapa inolvidable.
Andreas Lehe, miembro del consejo de fabricación de Bentley Motors, expresó su orgullo por el equipo que ha diseñado, desarrollado y fabricado este icónico motor durante tantos años. El W12, según Lehe, cambió radicalmente la imagen de la compañía y se convirtió en un auténtico referente en la industria.
El emblemático motor V12 biturbo de 6 litros dará paso a una nueva generación de propulsores híbridos de alto rendimiento, combinando la potencia de un V8 con la eficiencia de la batería. Esta tecnología, denominada «electrocharging», marcará el inicio de una nueva era para Bentley, caracterizada por vehículos aún más dinámicos, eficientes y sostenibles.
El W12 ha sido protagonista de récords y hazañas impresionantes, desde alcanzar velocidades máximas en hielo hasta conquistar los desafiantes caminos del Pikes Peak. Su legado perdurará en los corazones de los amantes del automóvil y en la historia de Bentley.
Aunque el W12 se despide, su legado continúa vivo en los modelos especiales de edición limitada Bentayga, Continental GT, Continental GT Convertible y Flying Spur Speed Edition 12, que rinden homenaje a este motor excepcional. Además, los exclusivos modelos Bacalar y Batur, creados por Mulliner, también cuentan con el poderoso W12 en sus últimas versiones.
El adiós al W12 es el inicio de un nuevo capítulo emocionante para Bentley, donde la innovación y la sostenibilidad serán los protagonistas. Sin embargo, el rugido del W12 permanecerá como un eco inolvidable en la historia de la marca británica.
