Automobili Lamborghini mantiene una estrecha relación con la personalización desde sus inicios. Dentro de su programa Ad Personam, la firma ofrece una gama de 400 colores, ampliable bajo solicitud del cliente, lo que permite adaptar el vehículo a preferencias muy concretas. Entre estos colores, hay tonalidades que han pasado a formar parte del imaginario de la marca, no por su impacto visual, sino por las historias que las acompañan.
Uno de los más singulares es el Verde Scandal. Su nombre y su tonalidad no surgen del diseño técnico ni de la aerodinámica, sino de un gesto inesperado. Para encontrar su origen, hay que retroceder hasta los años sesenta, cuando Lamborghini acababa de lanzar el Miura, modelo clave en la consolidación de la firma italiana. Fue entonces cuando una clienta solicitó un tono específico para su vehículo. No se trataba de un color del catálogo ni de una inspiración abstracta: quería que su Lamborghini tuviera el mismo color que el vestido que llevaba en aquel momento. El técnico que la atendió le pidió una muestra, y la mujer, sin dudarlo, se quitó la prenda y se la entregó. A partir de esa pieza nació el Verde Scandal, cuyo nombre no necesita mayor explicación.
Aquel episodio quedó registrado como una muestra más del compromiso de Lamborghini con la personalización. Todos los procesos relacionados con estos acabados continúan desarrollándose en las instalaciones de Sant’Agata Bolognese, manteniendo un enfoque artesanal ligado al diseño italiano y a una producción que prioriza el detalle y el control individualizado.
Hoy, ese mismo color reaparece en un nuevo escenario. El Verde Scandal ha sido elegido para vestir la carrocería de la Ducati Panigale V4 presentada el 9 de abril en la Semana del Diseño de Milán. Este modelo, inspirado en el Lamborghini Revuelto, conecta dos mundos que comparten filosofía: rendimiento, estética y carácter.
El Revuelto, por su parte, es el primer vehículo híbrido HPEV (High Performance Electrified Vehicle) de la firma. Supone el paso inicial hacia una nueva etapa de electrificación dentro de su catálogo, conservando las sensaciones y prestaciones asociadas a la marca. Aunque su misión es avanzar hacia un enfoque más eficiente, mantiene el ADN deportivo que ha definido a Lamborghini desde sus comienzos.
En este cruce entre tradición y evolución, el Verde Scandal sirve como punto de unión. No es sólo un color. Es un recuerdo tangible de una anécdota del pasado que hoy encuentra nuevas formas de expresión, ya no solo en coches, sino también en motocicletas. Y con ello, Lamborghini refuerza la idea de que el diseño no siempre parte del ingeniero o el diseñador. A veces, comienza con un gesto, una historia o un simple detalle convertido en símbolo.
