El próximo 3 de enero, tres unidades del Dacia Sandrider debutarán en el Dakar 2025. Este vehículo, desarrollado en colaboración con Prodrive, llevará a los equipos liderados por Nasser Al-Attiyah, Sébastien Loeb y Cristina Gutiérrez a enfrentar una de las competiciones más exigentes del mundo, que se extenderá hasta el 17 de enero.
El proyecto “Dacia Sandriders” ha sido puesto a prueba durante meses en escenarios como Reino Unido, Francia y Marruecos. Este último ensayo en el Rally de Marruecos, considerado un anticipo del Dakar, permitió al equipo no solo cosechar su primera victoria, sino también recopilar datos clave y ajustar el rendimiento del Sandrider T1+.
Un diseño ligero y eficiente
La ligereza ha sido un punto clave en el diseño del Dacia Sandrider. Prodrive, como socio tecnológico, ha trabajado en un chasis tubular más liviano y en la utilización de fibra de carbono para la carrocería. Estas medidas han permitido una reducción de peso de 15 kilogramos respecto a prototipos similares. Además, se ha eliminado cualquier elemento innecesario y se ha optimizado la aerodinámica para disminuir el consumo de combustible.
El motor V6 biturbo de 3 litros, compacto y ligero, ha sido estratégicamente ubicado en una posición central delantera, logrando un mejor reparto de pesos. Con 360 CV y 531 Nm de par motor, ofrece una respuesta adecuada para terrenos desafiantes como las dunas, manteniendo la fiabilidad durante las dos semanas de competición.
Dimensiones optimizadas para el terreno
El Sandrider presenta una longitud total de 4,14 metros, destacándose como uno de los vehículos más compactos en la categoría T1+. Sin embargo, su distancia entre ejes de 3 metros permite una mayor estabilidad a alta velocidad, mejor capacidad de superar obstáculos y aterrizajes más suaves en los saltos. Los neumáticos BF Goodrich de 37 pulgadas, posicionados en las esquinas, potencian su rendimiento en los terrenos más adversos.
Innovación tecnológica y sostenibilidad
El vehículo integra un sistema eléctrico de 48V que asegura el suministro constante de energía a los sistemas electrónicos, incluso en condiciones extremas. Por otro lado, funciona con combustible sintético desarrollado por Aramco, una solución que combina hidrógeno renovable y CO2 capturado. Este enfoque busca reducir las emisiones y hacer del Dakar un escenario de pruebas para tecnologías más sostenibles.
En cuanto al confort, los ingenieros han incluido un filtro antirrayos infrarrojos en los paneles de fibra de carbono. Este detalle minimiza el calentamiento del habitáculo, mejorando las condiciones para los ocupantes en temperaturas extremas.
Preparación y resultados previos
Antes de su participación en el Dakar, el Sandrider acumuló casi 7.500 kilómetros de competición durante el Rally de Marruecos, de los cuales 4.500 fueron cronometrados. En esta prueba, Al-Attiyah y su copiloto Édouard Boulanger lograron la victoria, seguidos por Loeb y Fabian Lurquin, quienes terminaron en segundo lugar, mostrando el potencial del vehículo desde su debut.
Tripulación experimentada
El equipo cuenta con pilotos de amplia trayectoria. Nasser Al-Attiyah suma cinco victorias en el Dakar y varios campeonatos mundiales FIA. Sébastien Loeb, con nueve títulos en el Mundial de Rallyes, sigue demostrando su habilidad en este tipo de competiciones. Por su parte, Cristina Gutiérrez, actual campeona del Dakar en la categoría Challenger, aporta su experiencia y ambición en este proyecto.
El Dacia Sandrider llegará al Dakar 2025 como una propuesta competitiva, con innovaciones técnicas que buscan optimizar el rendimiento y reducir el impacto ambiental en uno de los eventos más exigentes del deporte motor.