General Motors, en colaboración con TWG Global, ha alcanzado un acuerdo preliminar con la Fórmula 1 para que Cadillac se una al campeonato en 2026. Este movimiento no solo supone la incorporación de una nueva escudería, sino también el desarrollo de una unidad de potencia propia. Con esta estrategia, GM planea posicionar al equipo Cadillac como un competidor completo dentro de la categoría, diseñando tanto los monoplazas como los motores hacia finales de esta década. Este enfoque refuerza su intención de ser un jugador clave en la máxima competición automovilística.
El equipo Cadillac será el primero en unirse a la parrilla de Fórmula 1 desde 2016, convirtiéndose en el undécimo en disputar el campeonato. Esta entrada marca una apuesta por utilizar el deporte no solo como vitrina de tecnología y diseño, sino como un banco de pruebas para innovaciones aplicables a futuros desarrollos en la industria automotriz. Entre las áreas de interés destacan la electrificación, software avanzado, motores de combustión interna y sistemas de tren motriz, con beneficios que se extenderán a los productos globales de GM.
Mark Reuss, presidente de GM, subrayó la importancia de la Fórmula 1 como plataforma para demostrar la excelencia en ingeniería y el liderazgo tecnológico de la compañía. Por su parte, Dan Towriss, CEO de las operaciones de deportes de motor de TWG Global, destacó que el proyecto combina innovación estadounidense con una perspectiva global, construyendo un equipo que promete aportar emoción y calidad al campeonato.
La dirección del equipo estará reforzada por la presencia de Mario Andretti, campeón mundial de Fórmula 1 en 1978, quien asumirá un rol clave en el consejo directivo. Andretti expresó su entusiasmo por participar en un proyecto tan ambicioso, destacando su conexión emocional con el deporte y su compromiso por contribuir al éxito de la iniciativa.
Desde que GM anunció su intención de ingresar a la Fórmula 1 en enero de 2023, el equipo Cadillac ha reunido un talentoso grupo de especialistas para abordar áreas como aerodinámica, desarrollo de chasis y componentes, simulación de dinámica vehicular y software. Estas actividades se distribuyen en instalaciones estratégicas ubicadas en Fishers, Indiana; Charlotte, Carolina del Norte; Warren, Michigan; y Silverstone, Inglaterra, un epicentro del automovilismo mundial.
El historial de General Motors en deportes de motor respalda este proyecto. La compañía cuenta con más de 3,000 victorias en competiciones y ha ganado más de 100 campeonatos de pilotos y fabricantes. Además, Cadillac ya tiene experiencia en el automovilismo de alto nivel, destacándose en competiciones como IMSA y las 24 Horas de Le Mans. Estas credenciales refuerzan su capacidad para adaptarse a las exigencias técnicas y deportivas de la Fórmula 1.
La colaboración con TWG Global añade un importante respaldo. Esta entidad gestiona equipos como Andretti Global, Wayne Taylor Racing y Spire Motorsports, lo que demuestra su experiencia en múltiples categorías del automovilismo. Además, la asociación amplía el alcance de la iniciativa, vinculando a Cadillac con una red global de conocimiento y experiencia.
La entrada de Cadillac a la Fórmula 1 no solo busca consolidar su presencia en la competición, sino también reforzar su imagen como un referente tecnológico y de diseño en el sector automotriz. A través de esta plataforma, GM y Cadillac esperan conectarse con un público internacional diverso, abriendo nuevas oportunidades tanto en el mercado de automóviles como en el ámbito de la movilidad sostenible y avanzada.
Finalmente, este proyecto no solo beneficiará a la marca, sino que también tendrá un impacto en el panorama del automovilismo, añadiendo un nuevo competidor al campeonato, revitalizando la parrilla y fomentando la innovación técnica en uno de los deportes más exigentes del mundo.